Es el cumpleaños de Laura. Mi amiga desde el primer año del instituto.
Después de varios años regalándonos cositas en los cumpleaños, un buen día decidimos que ya éramos mayorcitas para estar siempre comprando cosas, que no necesitábamos nada, y en definitiva, que ya estaba bien de estar siempre gastándonos una pasta en regalos. ¡a mi esa decisión me pareció genial!
Pero ese año, con la excusa que el cumple era en sábado, y un poco por reunirnos, nos invitó a varios amigos a cenar en una pizzería.
Habíamos quedado en no regalarnos nada, pero ir a cenar invitada por ella, y con las manos vacías...
no me daba tiempo a coserle un bolso, ni una camisa, ni nada por el estilo, así que inmediatamente pensé en una tarta. Y el objeto a conseguir lo tenía clarísimo!!
Fue con poco tiempo y no tuve muchas opciones para preparar un bizcocho y un relleno rico, por lo que hice un bizcocho simple, con mermelada de fresa en el interior. (me salió algo seca, lo confieso, porque no le puse almíbar al bizcocho, pero de sabor, tenía su gracia...)
Y el motivo del dibujo es que la familia de Laura siempre ha tenido un negocio relacionado con el tema.
Cuando la vio creo que se quedó un poco sorprendida. Nunca había visto ninguna tarta de este tipo, y además era totalmente personalizada.
La marca es de maquinaria gallega 100% que para llegar a tiempo... ¡¡maloserá!! jajaja!!!
le fecha del reloj marca el día 16 (como está en color negro no se aprecia muy bien) y la hora del reloj marca muy puntual el 2 y el 7. Si, se unía al club de los "27"!!
Tenemos alguna foto más con las caras de alegría, conmigo sujetándole la tarta para tener foto en la posteridad, pero esas nos las vamos a guardar nosotras para recordar viejos tiempos más adelante!!
Me encantó hacer esta tarta. Fue una de las más... no sé. Era, es y seguirá siendo por mucho tiempo, la tarta que más "personalizada" he hecho. si alguien en aquella mesa la veía por allí, sabía para quien era.
No hay comentarios:
Publicar un comentario